La salud: un tema poco importante para los mexicanos

El 7 de abril se conmemora el Día Mundial de la Salud, que, además de recordar la fundación de la Organización Mundial de la Salud, sirve para destacar un tema de importancia y prioridad en el ámbito, y aplicar medidas de solución.

En México, no solo las cifras en problemas de salud tales como enfermedades crónico- degenerativas y accidentes son muy altas cada año, sino que las de falta de prevención, información y desatención son alarmantes, refiriéndonos a la responsabilidad que tiene cada uno de los ciudadanos sobre su propia salud o la de su familia. Según las estadísticas, solo el 5% de la población cuenta con un seguro de gastos mayores, el resto de ellos lo considera un lujo. Con ello, el gasto en salud privada asciende a un mes del gasto total familiar al año, sin considerar eventos traumáticos, cáncer o insuficiencia renal, como ejemplo s[i].

La diabetes es la enfermedad con más prevalencia entre los mexicanos, para 2030 se calculan 17 millones de enfermos en total[ii], un dato que ningún sistema de salud está en condiciones de afrontar, tomando en cuenta que solo el 15% alcanza sus métricas adecuados. Otro ejemplo importante es la hipertensión, pues de cada 100 casos, 70 son diagnosticados y solo la mitad se mantienen en control por parte de los pacientes. 

En términos de alimentación y control de nutrición, en México es más fácil y barato acceder a productos de bajo valor nutrimental y las personas no están educadas para distinguir los alimentos saludables, además de que no acceden a dejar de consumir bebidas azucaradas y los padres de familia se involucran poco en el control de sus hijos con obesidad, lo lamentable es que las enfermedades más comunes en México se pueden evitar con una alimentación sana y controlada, además de que la promoción del deporte tuvo el peor nivel en el 2016, de los últimos 50 años. 

Sin mencionar los índices de consumo de todo tipo de drogas, accidentes y de las consecuencias graves y costosas que traen consigo las enfermedades crónicas, es fácil darnos cuenta de que el sistema de salud, a pesar de todas sus carencias, no es el principal responsable de las altas cifras de morbilidad y mortalidad en el país, sino una serie de problemas y círculos viciosos entre lo administrativo, lo burocrático y el poco interés que demuestra el mexicano al ser diagnosticado e informado sobre la catástrofe que puede ocasionar en su cuerpo si no toma las medidas necesarias para dejar de dañarlo y cambiar su estilo de vida. Sin duda, a veces uno mismo es el peor enemigo de nuestro organismo.

Referencias Bibliográficas:

• Héctor Rode, vicepresidente de vida y salud de Axa
  
• Dr. Enrique Caballero, especialista en Diabetes.